Todos soñamos con tener una casa perfecta, que sea moderna y acogedora al mismo tiempo, que tenga todas las comodidades que esperamos en un hogar hoy en día, que sea amigable con el ambiente, así como también autosustentable.
Pensaríamos que esto es algo imposible de tener, pero todo puede hacerse con ingenio e imaginación, y los avances actuales que se han hecho en el mundo de la arquitectura y la construcción nos permite crear viviendas muy modernas y cómodas, pero a precios muy accesibles.
En este libro de ideas te presentaremos una casa que juega de manera extraordinaria con lo clásico y lo moderno. Los techos y estructura en general de esta casa nos recuerda a las tradicionales viviendas familiares a las que estamos acostumbrados, y que muchas veces observamos en los cuentos de hadas; sin embargo vemos detalles innovadores que nos muestra que estamos viendo una casa moderna, de pleno siglo XXI.
Los ventanales que comunican el interior con el exterior , las mezcla de materiales, y las pequeñas ventanas en el techo, son elementos que no hace pensar que estamos observando una casa que, si bien conserva el diseño clásico, propone nuevas formas de construcción.
Esta casa de 127 metros cuadrados tiene el tamaño ideal para una familia tradicional, pero moderna, así que echa un vistazo a lo que te estamos mostrando para que puedas replicarlo en tu proyecto de vivienda y tengas lo mejor de lo moderno y lo clásico.
La fachada frontal de la casa nos resulta, desde el punto de vista tradicional, muy clásica con la forma de su techo, la chimenea, entre otros elementos; no obstante, nos plantea una composición interesante de mezcla de colores y materiales, es decir, los muros blancos que armonizan a la perfección con los marcos de madera de la puerta y las ventanas, además del techo en un tono antracita.
Asimismo, la manera como se usa la luz exterior por medio de las ventanas, con las pequeñas ventanitas en el techo, y las que se ubican en la esquina, resulta novedoso.
En la fachada trasera observamos que la casa se abre al exterior por medio de un gran ventanal ubicado en todo el centro de la fachada y que va de arriba a abajo, así como también vemos un techo que cubre la parte de descanso. El detalle en piedra de la chimenea, la piscina y la abundante vegetación, dan un ambiente muy cálido y de total relajación.
Si bien el exterior de la casa tiene bastante elementos clásicos, el interior es mucho más moderno y ofrece espacios muy amplios y bastante iluminados, que ayudan a incrementar la amplitud del lugar. Además, la chimenea y los detalles de madera hacen un ambiente acogedor.
Las áreas sociales de la casa están conectadas, como se puede ver en el comedor, en el que el color de los muebles en madera clara hacen perfecta combinación con el color antracita de las lámparas de techo y las sillas hechas de metal, pero que simulan al mimbre para darle un aspecto más hogareño al lugar.
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La cocina es sencillamente un lugar impecable y brilla del techo a la pared, gracias al color blanco de todo el lugar y el acabado brillante del mobiliario que le da un extra de luminosidad al ambiente, además de frescura y pulcritud, justo la sensación que se espera tener en una cocina.
En este plano general de la casa es posible observar la excelente distribución de los espacios, y cómo los arquitectos han sabido aprovechar cada centímetro de los 127 metros cuadrados de construcción de esta hermosa casa, además, te da la oportunidad de que puedas replicarla.
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