10 Errores de decoración súper comunes… ¡Y cómo evitarlos!

Mariana Belisario Blaksley Mariana Belisario Blaksley
homify Scandinavian style dining room
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En el libro de ideas de hoy vamos a enumerar 10 errores que solemos cometer cuando decoramos nuestra casa y qué hacer para evitarlos. 

Y ya que hablamos de lo que no se debe hacer, aprovechamos para compartirles otro libro de ideas con los 12 errores que tenemos que evitar al renovar nuestra casa

A la hora de decorar nuestra casa, es muy fácil incurrir en errores casi sin darnos cuenta y lo que es peor, acostumbrarnos a pasar por alto esas metidas de pata por la fuerza de la costumbre. Si además somos de los que preferimos decorar nuestra casa, sin ayuda de arquitectos o diseñadores profesionales, el riesgo de hacer las cosas mal se triplica. 

Es por ello que todos necesitamos que de vez en cuando nos abran los ojos y nos saquen de esos errores para que de esta forma no los repitamos y evitemos que se conviertan en vicios. 

Cosas que pueden estar a la vista y cosas que no

En ambientes como el baño o la cocina podemos darnos el lujo de dejar algunos objetos que si bien no tienen un fin meramente decorativo, no contaminan visualmente. Estos elementos pueden ser la cristalería o la vajilla en la cocina o las toallas y frascos (siempre y cuando sean lindos) de productos de higiene personal. 

Revestimientos para el baño que no resistan la humedad

Los revestimientos para el baño deben cumplir con una función muy específica: ser impermeables o al menos resistentes a la humedad. Se ha puesto de moda utilizar madera en estos espacios, pero a menos que se trata de una variedad que no se vea afectada por el agua, es mejor optar por piedra, cerámicos, azulejos u otro tipo de revestimientos que resistan la exposición constante al agua. 

Vestir la cama con acierto

La cama es el centro del dormitorio, el mueble que sirve de eje para todo lo demás. Es por ello que las sábanas, cubrecamas, almohadas y almohadones deben elegirse bien, sin sobrecargar la cama y mantenerse dentro de una paleta que armonice y se complemente. 

Elegir los colores de acuerdo a la función del ambiente

La paleta elegida para cada ambiente debe condecirse con la función del espacio. Es así como en el dormitorio, que es un lugar esencialmente destinado a la relajación y descanso, es mejor optar por paletas reposadas, en tonos claros que transmitan serenidad. Los colores más vibrantes podemos utilizarlos en lugares de trabajo o áreas sociales. 

Tratar en vano de crear rincones íntimos

En todas las casas necesitamos ciertos rincones donde podamos disfrutar de tranquilidad y soledad. Ya sean lugares de lectura, espacios destinados a prácticas físicas como yoga o lugares de trabajo, es conveniente distribuir con arte los elementos necesarios para que estos rincones cumplan sus funciones, sin desentonar con el resto.

Jugar siempre a lo seguro

El miedo a arriesgarse o probar combinaciones nuevas pueden resultar en espacios sumamente aburridos y poco imaginativos. Para no caer en este error, lo mejor es reunir elementos de colores diferentes como sillas en el mismo espacio y combinar diferentes estilos decorativos, como rústico y moderno, o minimalista y vintage. 

No dejar de enfocarnos en los detalles

En la decoración de nuestra casa, cada detalle cuenta. Esto se extiende a los accesorios y a elementos como vajilla y cristalería. No debemos olvidar que todo contribuye a darle a nuestros espacios una impronta propia. 

Desaprovechar la luz natural

Los espacios iluminados por la luz del sol suelen ser mucho más alegres y agradables que los que dependen de la iluminación artificial. Para evitar que nuestros ambientes se vuelvan oscuros y lúgubres, lo mejor es abrir un buen número de ventanales, ventanas y claraboyas y dejar que el sol haga el resto. 

Usar el tipo de iluminación equivocada según cada ambiente

La iluminación de cada ambiente vendrá determinada por su función. Es así como en las áreas sociales buscaremos una iluminación más bien sugerente, mientras que la cocina y el baño requerirán de luces blancas que nos permitan ver en detalle lo que estamos haciendo. 

Dejar que reine el desorden

Si nos descuidamos en un santiamén el desorden puede apoderarse de nuestra casa. Afortunadamente podemos comprar muebles, estructuras y elementos que pueden ayudarnos a mantener nuestra casa más prolija. Percheros, armarios, estanterías, cajas y canastos pueden ser soluciones económicas al problema del desorden. 

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