En este libro de ideas vamos a hablar de un aspecto tan vital en nuestras casas como lo son las fachadas. Los arquitectos le dedican no poco tiempo no sólo al aspecto de la fachada, sino a un sinnúmero de consideraciones prácticas que muchas veces ni llegamos a imaginarnos.
Hoy vamos a centrarnos, sin embargo, en un aspecto que nos parece esencial y es la gran cantidad de influencias arquitectónicas que son el legado que trajeron consigo las colonias europea que se radicaron en la Argentina durante el siglo XVII, XVIII y XIX.
Los estilos en boga en España, Francia, Inglaterra, Italia y Alemania se replicaron con frecuencia en la Argentina, en las casas construidas en las grandes ciudades y en los hoy en día cascos históricos de las estancias que podemos encontrar en toda la extensión del territorio argentino y muy especialmente en la Provincia de Buenos Aires.
Esa herencia se refleja hoy en día en las fachadas de las casas que se construyen en grandes lotes y que tienen mucho de esas estancias con aires clásicos, coloniales, victorianos, neoclásicos, racionalistas o modernistas.
Acompáñennos a conocer un poco más de todos esos estilos en estas fachadas de casas argentinas.
Las fachadas de casas argentinas, como decíamos más arriba, pueden presentar aires distintivamente europeos y ciertos elementos de estilos anteriores al siglo XX, como pueden mostrarnos verdaderos ejemplos de arquitectura modernista. El legado arquitectónico, por ejemplo, es un espejo de las diferentes influencias culturales que dejaron su huella en toda la Argentina.
Esta impronta francesa, rural y mediterránea no es la más frecuente en nuestro país, pero aún así en ocasiones nos muestra ejemplos tan encantadores como el de la imagen.
Una recreación rigurosa de un estilo que caló muy hondo en la arquitectura argentina. Muros de ladrillo visto con junta rasada y almohadillas de revoque, mansardas negras, barandas de forja artesanal y molduras para enmarcar las aberturas y realzar el portal principal en doble altura se unen para recrear la impronta victoriana.
Esta fachada clásica y rural, es el vivo reflejo de los cascos históricos de muchísimos campos que podemos encontrar en la Provincia de Buenos Aires. El tradicional porche con columnas de hierro de forja son uno de esos aspectos, así como las ventanas y los techos a dos aguas.
En la Patagonia, la influencia del estilo alpino se refleja aún en nuestros días. Se utiliza madera local, de pino o de ciprés y diseños muy similares a los que encontraríamos en las montañas de Bavaria.
Uno de los estilos más generalizados, especialmente en la ciudad de Buenos Aires y en provincia, es el estilo neoclásico francés. Para un resultado fiel a las casonas francesas originales, los arquitectos utilizaron muros terminados con cemento piedra París, cubierta de pizarra negra con mansardas, balustres, molduras y almohadillados y carpinterías blancas de alta prestación.
Esta casa exuda estilo colonial español, gracias a su volumetría, sus molduras, sus rejas, su portón y los detalles en cerámicas, especialmente traídas de España.
Una fachada monocromática, con volúmenes rematados en molduras simplificadas y líneas depuradas, nos demuestra la maestría con la cual los arquitectos argentinos adoptaron los movimientos arquitectónicos del siglo XX.
El llamado estilo pueblo
es un reflejo de las casas que encontramos en el interior de la Provincia de Buenos Aires, con techos planos, grandes ventanales y detalles muy elaborados en hierro de forja.
Un maravilloso ejemplo de casa de estilo modernista con una volumetría geométrica y listones de hormigón dispuestos en forma aleatoria para preservar la intimidad en el interior.
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Una clásica casa de campo, típicamente argentina, si es que algo así existe, que fusiona el lujo de diferentes estilos europeos, con elementos campestres.
No podía faltar, dada la gran cantidad de italianos que se establecieron en la Argentina, un ejemplo de arquitectura que nos remontada a la Toscana, con detalles típicamente regionales como la paleta en ocres y terracota, las tejas matizadas, los muros anchos las y grandes galerías que rodean la casa.
Un modelo de casa muy depurado y sofisticado que se suele ver con frecuencia dentro de las grandes ciudades argentinas. Su fachada toda en blanco, nos ayuda a apreciar la belleza y corrección de sus líneas.
Un estilo muy frecuente en el sur de nuestro país, que tiene vestigios de elementos típicos de la arquitectura americana o alemana para casas de montaña.
Un estilo que se ve a menudo en la Costa Atlántica argentina es el estilo country normando. Para logralo, en esta casa se usó ladrillo artesanalmente trabajado, madera en las aberturas y en los muros y cubierta de tejas negras y un aire imponente y sólido, casi medieval.
Los estilos tradicionales argentinos fusionan diferentes elementos, como techos que son alternativamente planos, inclinados a dos aguas, patio central, un solo piso y tejas de arcilla en los techos que presentan alguna inclinación.