Loft de ensueño en Las Palmas

Marisa Alcore Marisa Alcore
The Loft, Alonso + Sosa arquitectos Alonso + Sosa arquitectos
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En el barrio de Triana, en el corazón de Las Palmas de Gran Canaria, se ha restaurado un edificio histórico. Cada una de sus plantas se ha convertido en un contemporáneo loft y en la azotea una terraza de uso común permite disfrutar de las vistas en compañía.

Triana es uno de los barrios históricos de la capital Canaria y no solo comparte nombre con un famoso barrio de Sevilla, también su imagen tiene similitudes. Paseos, alamedas, teatros y edificios modernistas construidos para la sociedad burguesa que aquí residía. 

En uno de esas maravillas de antes, en un edificio histórico que data del año 1.900, el estudio Alonso – Sosa Arquitectos ha reciclado el interior sin alterar el continente. Una atmósfera moderna con tintes del pasado. 

Los apartamentos

The Loft es una manera diferente de disfrutar de la isla como turista. Los tres apartamentos de esta casa histórica, cada uno de ellos ubicado en una altura diferente, están en alquiler todo el año recibiendo con los brazos abiertos a esos viajeros que buscan un alojamiento diferente. Cómodos y con grandes dosis de diseño, estos tres lofts nos aceptan como vecinos en un barrio exquisito de la ciudad: calles peatonales, buenos restaurantes, museos y monumentos. 

Una vez cruzada la puerta principal y tras haber admirado la maqueta de la ciudad de Las Palmas que se encuentra en el pasillo, podemos elegir dos modalidades diferentes de apartamento. 

Si os gustan los balcones existen dos opciones. En primera y segunda planta se hallan dos luminosos apartamentos con vistas abiertas en la fachada principal. El apartamento es diáfano, pero gracias a la posición estratégica de cada pieza de mobiliario se consiguen diferenciar los usos sin perder la unidad espacial. Así que nos decidimos por un apartamento de techos altos, donde las viguetas de madera de la estructura original crean un ritmo cálido en las alturas. El pavimento también es una maravilla: el parqué original se ha restaurado haciendo que brille como nuevo. Colores dispares e intensos que conviven con elegancia y originalidad, al igual que las diferentes piezas que mueblan la estancia. En la imagen anterior veíamos un comedor compuesto por los contrastes. En esta imagen, la cama le da la espalda al resto. 

Al otro tipo de Loft accedemos desde planta baja. Aquí, un apartamento de 42 metros cuadrados divide sus usos en diferentes alturas. La cama se eleva sobre la zona de estar, alejándose de tipologías que entremezclan y comparten usos. El baño se encuentra en un espacio diferente y junto a la escalera de caracol que nos da acceso a la entreplanta superior. 

Arriba encontramos el resto del programa que le falta a este apartamento: cocina y comedor. Se encuentran en una especie de altillo que aprovecha los altos techos para ordenar los usos en alturas. Y su ventaja: el espacio de arriba vuelca en doble altura a la planta inferior, mientras una barandilla construida con hierro y redes,de las que se utilizan para pescar atunes nos protege. Y este hecho de reciclar objetos se observa en muchas partes del proyecto: el edificio se restaura, intentando alterar lo mínimo posible su imagen histórica; se intenta tomar la mayoría de elementos de decoración y mobiliario de anteriores usos del edificio, dándoles una nueva imagen gracias al color. Las otras piezas han sido diseñadas por los propios arquitectos. 

La escalera

La escalera central de la casa es una de esas perlas de la corona. Se conserva íntegramente, al igual que la fachada neoclásica original. El olor a madera y el crujir de los peldaños inundan el gran espacio desde donde es posible tener cruzar miradas a las diferentes alturas. 

El último tramo, sin embargo, se ha construido bajo una imagen diferente para evitar entrar en competiciones. Una lámina de acero plegado lacada en blanco da acceso a la azotea del edificio: un espacio común de la vivienda donde es posible disfrutar de unas vistas inmejorables. Una ventana arroja luz al ascenso y deja que el cielo se asome a través del vidrio. 

La azotea

La terraza situada en cubierta es un pasatiempo más que ofrece The Loft Apartments. Forrada de maderas amarillas que se encienden bajo la luz del sol, este espacio de uso común para todos los inquilinos nos ofrece inmejorables vistas sobre los tejados de los edificios del barrio: un paisaje urbano dominado por la inmensidad del cielo. 

Pero este no es el único pasatiempo que nos ofrece la terraza. Hamacas de color lila han improvisado un solárium para los que prefieren estar más tiempo fuera que dentro. 

Si te ha gustado este libro de ideas te recomandamos que le eches un vistazo a estos dos:

- homify 360°: El antes y el después de un hotel romántico

El loft de un fotógrafo

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