Decoración que enamora: una reforma en blanco

Marisa Alcore Marisa Alcore
Reforma integral de una villa situada en Mallorca, ISLABAU constructora ISLABAU constructora Kitchen
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El color más de moda en el diseño de interiores es el blanco, no hay ninguna duda. Aparte de ser luminoso o de crear sensación de amplitud, se asocia con sencillez y pureza. Cuando además, se aplica en espacios ligados con el Mediterráneo, el resultado es explosivo. Es el caso de la villa que visitamos hoy en este libro de ideas. Se sitúa en Santa Ponça, Mallorca, y ha sido recientemente reformada por la empresa Islabau Constructora. Además de sustituir el antiguo pavimento, el cuarto de baño y la cocina y mejorar sus instalaciones, la casa ha renovado por completo su estilo, convirtiéndose en un referente de elegancia minimalista. Recorremos sus estancias a través de la siguiente colección de fotografías. 

El espacio

Tradicionalmente, estamos acostumbrados a los apartamentos donde diferentes tabiques compartimentan los espacios en estancias. En estos casos, la fluidez no tiene lugar y aburridos y, en ocasiones enrevesados, pasillos nos conducen a las diferentes habitaciones del programa. Sin embargo, en esta villa mallorquina se quiso experimentar con la organización y construir una casa que fuera sencilla de habitar. Los diferentes espacios se suceden, se abren unos a otros sin puertas y permiten que la continuidad esté asegurada. 

La cocina, el comedor y el mar

Todo los usos de la zona de día se sitúan en diferentes rincones, todos comunicados entre ellos. Nos asomamos al espacio donde se colocó la cocina, a la que se acompañó de una mesa de comedor para ganar funcionalidad.  A pesar de que el color blanco toma el protagonismo de prácticamente todos los elementos en esta imagen, al fondo pueden vislumbrarse el maravilloso paisaje que rodea a esta villa balear. 

Destacan como piezas de mobiliario la mesa de madera y las sillas de los diseñadores Eames dándole al conjunto modernidad y clase. 

La zona de estar

En un espacio contiguo al de arriba se creó un ambiente relajado donde una chimenea y un balcón son los mayores atractivos. El blanco aquí solo se interrumpe con la presencia de notas puntuales, creándose una atmósfera relajada y armónica. El pavimento continuo color crema favorece la fuerza de esta esencia mediterránea y sosegada, remarcando con la ausencia de juntas la fluidez que existe entre las distintas estancias. 

Y el gran salón

Los metros cuadrados no eran un problema, y el salón decidió aprovecharse de la gran superficie de la villa para desarrollarse espaciosamente. Un gran sofá de color oscuro, un cuadro, una original estatua budista de color barro y una esquemática televisión habitan en esta estancia, donde la luz natural rebota sobre las superficies. El ambiente es tranquilo y fresco, sensaciones que evoca el paisaje que se cuela tras las vaporosas cortinas blancas que cubren las ventanas. 

Las habitaciones más privadas

En la planta baja de la villa se diseñaron las habitaciones de carácter público, mientras que la planta de arriba se reservó para los usos de carácter más público, como los dormitorios o cuartos de baño. A simple vista, podemos apreciar que el diseño se vuelve más colorido, potenciado sin ninguna duda por el negro del pavimento. La decoración, los materiales y sus acabados y la iluminación crean un ambiente más íntimo y personal. 

Una escalera

Una escalera pavimentada en mármol da acceso a los propietarios de esta villa a las diferentes plantas. La barandilla blanca contrasta con el color miel de la piedra; el resultado: un ambiente elegante y sofisticado, pero que mantiene su esencia sencilla. 

Lo mejor: las vistas

Pero, aparte del paisaje interior, el paisaje exterior se convierte en uno de los privilegios más destacados de la casa. Además, las estancias más afortunadas disfrutan de un pequeño balcón o terraza, como la que vemos en esta fotografía, para sacar el máximo partido a la ubicación y el clima. Muebles más modernos se combinan a lo largo de la villa con piezas más clásicas, dando como resultado un estilo desenfrenado. 

El cuarto de baño

En el cuarto de baño, se buscó llegar al equilibrio correcto entre la funcionalidad y la estética. Para el primero de ellos, se redistribuyeron sus usos, apostando por sanitarios más modernos y adecuados como la ducha a la italiana o el lavabo. Para el segundo, se empleó como material protagonista el mármol, empleado tanto en pavimentos como en revestimientos. 

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